En los últimos tiempos se ha visto que muchas empresas han empezado a innovar en su manera de pensar para incluir una nueva visión sobre la remuneración. Aunque muchas empresas han dedicado horas y horas al tema de los salarios, en promedio desde el alto ejecutivo hasta los empleados nuevos han estado descontento en algún momento sobre la cantidad de dinero que perciben por su trabajo.
Por esto es que hay departamentos de Recursos Humanos que desean implementar un sistema innovador de remuneración y para esto es necesario derribar mitos que existen sobre el salario para poder darle un nuevo giro al tema.
Mitos:
La empresa puede reducir sus costos pagando menos a las personas. ¿Una buena variación de lo barato sale caro al final? Cuando Gerencia está convencida de que los salarios y los costos laborales son la misma cosa y pueden bajar salarios para encontrarse con la sorpresa que los costos laborales aumentaron.
Pagar poco a los empleados representa una ventaja competitiva sostenible. El talento es lo que cuenta hoy en día y el talento cuesta. Como dice la famosa frase que se ha vuelto viral, “si crees que contratar un profesional es caro, espera a ver lo que te cuesta un amateur”. Las empresas están conscientes de que sus empleados deben estar especializados en ciertas áreas y esa experiencia vale. Ahí existe una situación sostenible en el tiempo.
A las personas solamente les interesan el dinero. Falso pero muy falso. Hoy en día las personas están trabajando por eso y otras cosas también. Trabajan para darle sentido a su vida, trabajar para vivir, no vivir para trabajar. Hay personas que están desarrollando marcas personales y tienen una reputación dentro de una industria. En resumen, no todo es dinero, sino calidad de vida también.
Bonos individuales mejoran el rendimiento del grupo. Se ha visto que los bonos de desempeño individuales casi siempre es la mejor forma de sabotear el desempeño de un grupo promoviendo las acciones de corto plazo y desincentivando el sentimiento de pertenencia a un grupo de trabajo.
En resumen, las empresas y los empleados quieren una sola cosa en común: estabilidad. Y se está viendo un cambio de mentalidad que está promoviendo un nuevo paradigma en lo que salarios, empresas y empleados se refiere.
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